Normal
0
21
false
false
false
ES
X-NONE
X-NONE
MicrosoftInternetExplorer4
/* Style Definitions */
table.MsoNormalTable
{mso-style-name:»Tabla normal»;
mso-tstyle-rowband-size:0;
mso-tstyle-colband-size:0;
mso-style-noshow:yes;
mso-style-priority:99;
mso-style-qformat:yes;
mso-style-parent:»»;
mso-padding-alt:0cm 5.4pt 0cm 5.4pt;
mso-para-margin-top:0cm;
mso-para-margin-right:0cm;
mso-para-margin-bottom:10.0pt;
mso-para-margin-left:0cm;
line-height:115%;
mso-pagination:widow-orphan;
font-size:11.0pt;
font-family:»Calibri»,»sans-serif»;
mso-ascii-font-family:Calibri;
mso-ascii-theme-font:minor-latin;
mso-fareast-font-family:»Times New Roman»;
mso-fareast-theme-font:minor-fareast;
mso-hansi-font-family:Calibri;
mso-hansi-theme-font:minor-latin;}
Aunque la «revolución» (o más bien involución)
neoliberal prometió allá por la ya lejana década de los años 80 una utopía capitalista
rebosante de individualismo, competencia y libre mercado, ello no fue más que una
elaborada retórica que ha permitido, tal y como cuenta el economista Guy Standing en el
siguiente video, que se desarrolle la economía de mercado menos libre
que jamás haya existido, un sistema económico asfixiado por una nueva cleptocracia rentista
que monopoliza la riqueza mucho más eficientemente que los antiguos soberanos y
aristócratas de antaño.